Translate

TILIKUM

Era una mañana resplandeciente en Florida, donde centenas de familias habían llegado a SeaWorld (Orlando) con la ilusión de vivir una experiencia inolvidable junto a los increíbles mamíferos marinos. A medida que caminaban por el extenso parque, no podían contener la admiración y la curiosidad ante tantas especies exóticas y singulares, especialmente los mas peques, quienes corrían y jugaban con la energía propia de la infancia.

Llegada la hora del espectáculo acuático protagonizado por Tilikum, la gran orca blanca, el público tomó asiento en las gradas con una mezcla de anticipación y gozo. El sol brillaba alto en el cielo, reflejando sus rayos sobre las tranquilas aguas del estanque, mientras la música de fondo anunciaba la proximidad del evento.

De repente, el agua comenzó a burbujear y salpicar cerca del borde de la piscina, haciendo que los niños gritaran de emoción. Apareció Tilikum, emergiendo elegantemente de las profundidades, seguida de otras dos orcas menores. Sus grandes aletas traseras ondularon suavemente a medida que nadaban en círculos, sumergiéndose y emergiendo nuevamente, complaciendo a la audiencia ansiosa de contemplarlos.

Entonces, las tres orcas se separaron, preparándose para ejecutar complicadas maniobras sincronizadas al compás de la música. Saltos, volteretas y arcos impresionantes fueron ovacionados por el público, quienes vitoreaban y aplaudían el trabajo coordinado de los mamíferos y sus domadores humanos. Incluso se podría decir que reinaba un ambiente de magia y encanto dentro del parque.

Repentinamente Tilikum giró velozmente dirigiéndose hacia Dawn, la amable entrenadora que tanto tiempo había dedicado a construir un vinculo de confianza con el imponente animal. Ella permanecía de pie junto al bordillo de la piscina, con la espalda vuelta al enorme cetáceo.

En menos de un instante, Tilikum levantó su colosal cuerpo fuera del agua, balanceándolo sobre Dawn con fuerza devastadora. La joven intentó zafarse, pero antes de poder dar media vuelta, la potente mandíbula de la bestia aferró su melenuda coleta, halándola incontenible hacia las frías profundidades.

Bajo el agua, el pánico y el dolor se apoderaron de Dawn, mientras la furia de Tilikum se desató contra su cuerpo indefenso. Golpes brutales, jadeos ahogados y un terrible silencio rodearon a la mujer, quien soportaba impotente el salvaje castigo infligido por la ballena. Aquella que minutos antes era objeto de admiración y respeto, ahora se mostraba como una máquina letal, sin piedad ni remordimiento.

Cuando la superficie del agua volvió a la calma, solo quedaron las tenues burbujas que ascendían desde las sombras. Entonces, los primeros surcos de color carmesí aparecieron entre las olas, extendiéndose rápidamente hasta cubrir completamente la extensión del estanque.

Un grito colectivo brotó de las gargantas de los presentes, fusionándose con el chillido histérico de los niños y el gemido consternado de los adultos. Todos estaban petrificados, incapaces de procesar lo que acababan de presenciar. Ante ellos, la fiesta infantil se tornó una zona de guerra, los globos y souvenirs abandonados y en el agua un inmenso charco rojizo que recordaba demasiado bien la sangre vertida.

Nunca olvidarían ese día, el día en que el sueño de libertad de Tilikum se transformó en una pesadilla para todos los allí presentes.


NOTA HISTORICA: En 2010, una orca asesina llamada Tilikum dejó al mundo con la boca abierta cuando atacó a su cuidadora en SeaWorld (Orlando). Dawn Brancheau le dio la espalda a Tilikum durante una actuación y el animal la agarró por la coleta, la arrastró bajo el agua y la asesinó. Ya había asesinado a dos personas antes (en 1992 y 1999).